-Si quieren tener el mejor siempre los mejores días de sus vidas, no necesitan ni dinero, ni belleza ni nada de esas cosas superficiales. Lo que deben entrenar desde ahora es su perspectiva.- dijo el profesor a sus alumnos el primer día de clases.
-¿La perspectiva?- preguntó alguien en la parte de atrás.
-Por su puesto. La forma de ver las cosas en las infinitas situaciones que nos pueden estar pasando en estos momentos.-
El profesor cogió una tiza del escritorio y empezó a trazar un pequeño diagrama en la pizarra.
-Les daré un ejemplo. Imaginen a dos personas, Lucio y Omar. Lucio y Omar son dos universitarios que vienen a esta universidad, el día de hoy, jueves. Lucio está perdidamente enamorado de Olivia, una chica de su misma promoción y sabe que hoy jueves, ambos llevarán las mismas clases, por ello, en la mañana se despierta de muy buen humor y con muchas energías porque sabe que se encontrará con su amada Olivia el día de hoy y quizás pueda conversar con ella e incluso invitarla por fin a salir.-
El profesor siguió dibujando en la pizarra.
-Ahora veamos el caso de Omar. Omar ha terminado con su novia hace unas semanas y está completamente devastado. Llora todas las noches y quisiera quedarse en su habitación todo el día. Para el despertarse es un pesar y su vida se malogra incluso antes de haber comenzado.- -Pero los dos viven situaciones distintas, no tiene que ver mucho su perspectiva de las cosas porque ellos ven lo que realmente están pasando.- dijo un alumno de las primeras filas.
-Eso es correcto. Pero ¿qué tal si invertimos ahora los papeles? Lucio en vez de sentirse motivado por ver a Olivia el día de hoy, se levanta con tristeza porque piensa que es muy probable que no llegue a hablar con ella como los anteriores jueves del semestre y que probablemente Olivia lo detesta o no le agrada. Su día ahora es el que está malogrado desde el comienzo. En cambio Omar se despierta decidido a olvidarse completamente de su anterior novia, con el pensamiento de qué hoy será un excelente día y quién sabe, de repente conoce a alguien especial el día de hoy. Su día ahora es más radiante y lleno de esperanza. Ambos están viviendo el mismo día jueves, las mismas situaciones, pero ambos han cambiado la forma de ver las cosas, su perspectiva, y en base a ello, han malogrado o mejorado totalmente sus días.-
-La pregunta sería ahora ¿cómo entrenamos nuestra perspectiva de las cosas?-
-Eso es algo que toma mucho tiempo, pero será algo que veremos la próxima clase.-
-¿La perspectiva?- preguntó alguien en la parte de atrás.
-Por su puesto. La forma de ver las cosas en las infinitas situaciones que nos pueden estar pasando en estos momentos.-
El profesor cogió una tiza del escritorio y empezó a trazar un pequeño diagrama en la pizarra.
-Les daré un ejemplo. Imaginen a dos personas, Lucio y Omar. Lucio y Omar son dos universitarios que vienen a esta universidad, el día de hoy, jueves. Lucio está perdidamente enamorado de Olivia, una chica de su misma promoción y sabe que hoy jueves, ambos llevarán las mismas clases, por ello, en la mañana se despierta de muy buen humor y con muchas energías porque sabe que se encontrará con su amada Olivia el día de hoy y quizás pueda conversar con ella e incluso invitarla por fin a salir.-
El profesor siguió dibujando en la pizarra.
-Ahora veamos el caso de Omar. Omar ha terminado con su novia hace unas semanas y está completamente devastado. Llora todas las noches y quisiera quedarse en su habitación todo el día. Para el despertarse es un pesar y su vida se malogra incluso antes de haber comenzado.- -Pero los dos viven situaciones distintas, no tiene que ver mucho su perspectiva de las cosas porque ellos ven lo que realmente están pasando.- dijo un alumno de las primeras filas.
-Eso es correcto. Pero ¿qué tal si invertimos ahora los papeles? Lucio en vez de sentirse motivado por ver a Olivia el día de hoy, se levanta con tristeza porque piensa que es muy probable que no llegue a hablar con ella como los anteriores jueves del semestre y que probablemente Olivia lo detesta o no le agrada. Su día ahora es el que está malogrado desde el comienzo. En cambio Omar se despierta decidido a olvidarse completamente de su anterior novia, con el pensamiento de qué hoy será un excelente día y quién sabe, de repente conoce a alguien especial el día de hoy. Su día ahora es más radiante y lleno de esperanza. Ambos están viviendo el mismo día jueves, las mismas situaciones, pero ambos han cambiado la forma de ver las cosas, su perspectiva, y en base a ello, han malogrado o mejorado totalmente sus días.-
-La pregunta sería ahora ¿cómo entrenamos nuestra perspectiva de las cosas?-
-Eso es algo que toma mucho tiempo, pero será algo que veremos la próxima clase.-
Comentarios
Publicar un comentario